Decidimos visitar Viena en el año 2012 porque temiamos que Edimburgo en Febrero tendría un tiempo terrible, craso error ya que pasamos mucho frío aunque cabe decir que la ciudad nevada tiene muchísimo encanto.
¿Qué podemos visitar en Viena?
La antigua capital del Sacro Imperio Romano Germano ofrece un montón de atracciones tanto culturales como gastronómicas y de otra índole. Vamos ahacer un breve repaso de los lugares de interés:
El palacio de Belvedere, allí aparte de visitar en precioso palacio barroco del siglo XVIII puedes admirar una galería de arte muy interesante que contiene entre otras piezas la famosa obra de Gustav Klimt, el beso.
La Cripta Imperial de los Habsburgo. Esta cripta capuchina barroca contiene los restos mortales de gran parte de la familia de emperadores y reyes de la dinastia de los Habsburgo, entre ellos podemos encontrar a Francisco José o la Emperatriz Sisi. El interés reside principalmente en las tumbas barrocas, auténticas obras de arte, muy recomendable aunque suene un poco siniestro.
Museo de Historia de Arte en Viena. Este museo alberga piezas de todos los tiempos desde Egipto hasta los tiempos más comteporaneos. Recuerdo que tenían una colección de numismática de gran valor.
Palacio de Schönbrunn, el palacio por excelencia de los emperadores germanos, una visita imprescindible.
Ayuntamiento de Viena, es un edificio precioso y llamativo de estilo neogótico que además cuando nieva instala una pista de patinaje preciosa que hará los encantos de grandes y pequeños.
Parque de Prater, parque enorme donde puedes perderte literalmente, además tiene un pequeño parque de atracciones con una noria enorme, era la más grande de Europa hasta que construyeron el Eye de Londres.
Catedral de San Esteban y iglesia de San Carlos Borromeo, dos edificios religiosos de obligatoria visita para deleitarse con el arte secular que ofrece la ciudad.
Otros lugares de interés; la casa de Mozart, visita el mirador al Danubio, Palacio Hofburg, Biblioteca Nacional de Viena, pastelerias varias.
Nunca hemos pasado tanto frío como en Viena, nos nevó el segundo día y aunque íbamos protegidos nosotros no estábamos preparados sinceramente para este frío. Para ver bien la ciudad necesitaras al menos 4 días completos, nosotros estuvimos seis y nos dejamos sitios, además puedes visitar Salzburgo a las afueras, ciudad nata de Mozard. Dejando de lado que Viena tiene muchos lugares culturales de gran interés, otro de los grandes encantos que ofrece la capital austriaca es sentarse en una cafetería degustando esos deliciosos pastelitos de chocolate y ver como cae la nieve a través de la ventana, fue realmente bonito de ver. También nos lo pasamos en grande patinando en la pista de hielo instalada enfrente del ayuntamiento y es muy grande con diferentes caminos a elegir. Además Viena tiene fama de ofrecer mercadillos preciosos en primavera y celebrar festivales muy interesantes, por lo tanto es una ciudad que siempre ofrece una buena excusa para ser visitada. A nosotros nos encantó y espero animaros a visitarla algún día. Os dejamos algunas fotos para dar color a toda esta información.